En las condiciones economicas actuales, es muy común encontrar personas desesperadas por conseguir empleo, y
cuando suele aparecer un empleo no necesariamente sea en tu área, pero como lo
que necesitas es un empleo pues aceptas lo que sea que aparezca, de hecho lo
aceptas muy optimista, lleno de expectativas. Conforme transcurre el tiempo, el lugar que
ocupaban las expectativas lo empieza a ocupar la desilusión. Sencillamente nada
es mas tedioso que pasar horas y horas trabajando en un lugar donde no te
sientes cómodo, días y días ejecutando una labor que no te gusta,
que no disfrutas, años y años quizás rodeado de personas que sientes que no te
valoran, o no te entienden y con unos jefes que de acuerdo a tu propio criterio
no saben manejar una empresa mucho menos personas.
Con lo corta que es la vida, como evitar
caer en ese cuadro? La respuesta es
simple, uno tiene que amar lo que uno hace, no importa lo que sea que
hagamos. Cuando nos gusta lo que
hacemos, pues lo hacemos bien. Cuando
hacemos las cosas bien, no importa lo que lleguen a decir los demás, es más los
demás tendrán que hablar bien de ti. Tu valor como empleado aumenta considerablemente,
aumentan los ingresos y aumenta tu motivación de levantarte en las mañanas y
seguir disfrutando de tu vida. Despues de todo es mejor vivir la vida que desperdiciarla en un ambiente de trabajo deprimente.
No olviden el ingrediente mas importante de la receta. Ponganle amor a todo lo que hacen.
No olviden el ingrediente mas importante de la receta. Ponganle amor a todo lo que hacen.
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